jueves, 23 de octubre de 2014

 
 

Consejos para curar bien la herida del perro

  • No todos los perros permiten que se realice una exploración en detalle de su herida de un modo tranquilo. En estos casos, contar con un bozal en casa puede ayudar.
  • El pelaje del perro puede entorpecer la cura de la herida. Esto explica que sea recomendable recortar el pelo de nuestra mascota en la zona que rodea la lesión. Hágalo de forma cuidadosa, con la ayuda de una tijera.
  • Aplicar un poco de hielo sobre la zona ayudará a reducir el dolor y a rebajar la inflamación a consecuencia de la herida.
  • Utilice un antiséptico de yodo para desinfectar la herida de su perro.
  • Deje que la herida cure sin tapar. En estos casos, utilizar un collar isabelino impedirá que el can tenga acceso a la herida con su boca.


cuando su gato tenga la uña encarnada


Descripción Una uña encarnada de un gato es similar al de una uña encarnada de un ser humano. La uña crece dentro de la carne en la pata de un gato de la misma manera que un clavo crece en la piel de una persona que camina. Este problema no ocurre muy a menudo con la mayoría de los gatos, pero cuando lo hace, se debe tratar de inmediato porque la uña encarnada puede abrir una herida a través de la cual las bacterias pueden entrar, causando una infección.Descripción
Una uña encarnada de un gato es similar al de una uña encarnada de un ser humano. La uña crece dentro de la carne en la pata de un gato de la misma manera que un clavo crece en la piel de una persona que camina. Este problema no ocurre muy a menudo con la mayoría de los gatos, pero cuando lo hace, se debe tratar de inmediato porque la uña encarnada puede abrir una herida a través de la cual las bacterias pueden entrar, causando una infección.



Signos y síntomas Un gato tiene una uña encarnada mostrar muchos signos del problema. El gato puede caminar torpemente, dando un paso a la ligera en la pierna con la uña encarnada. Aparecerá el gato más agitado e irritable si la pinza está causando dolor. Mediante el examen de las patas del gato, te darás cuenta de la uña encarnada como el gato no va a ser capaz de retirar cómodamente y sus alrededores puede aparecer dañado, herido o infectado.


Prevención
El absolutamente seguro de manera de prevenir una uña encarnada en su gato es que el gato la cirugía de garras (eliminación de todas las garras del gato). Sin embargo, algunos dueños de gatos parece que esto es una práctica inhumana. Si usted pertenece a ese grupo, entonces la garra inspección regular y el corte son sus mejores opciones. Tenga cuidado de no cortar abajo la uña de gato rápido. (Cuanto mayor sea la carne rosada dentro de la uña en la base de la uña.) De esta manera el gato mucho dolor, y realmente puede hacer que la uña vuelva a crecer correctamente y ser enterrada

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Hay que tener en cuenta que el buen cuidado de las mascotas no se centra sólo en darle de comer, acariciarlo y sacarlo a pasear. Las vacunas son parte esencial de una tenencia responsable de mascotas y ayudarán a que tu gato viva por mucho tiempo mas

las vacunas mas importantes del gatos
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Es importante que sepas que antes de empezar con el proceso de vacunación, debes desparasitar a tu gatito. Normalmente, a partir del primer mes de vida ya se puede llevar al gato al veterinario para que le proporcione el tratamiento adecuado una vez terminado este proceso se inicia las vacunas





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Las vacunas obligatorias son aquellas que se administran al gato para protegerlo de las enfermedades más comunes que suelen sufrir estos animales. Así pues, en su calendario de vacunación constarán la de la leucemia,  panleucopenia, rinotraqueitis y calicivirosis como obligatorias. En cuanto a la vacuna de la rabia, no en todos los países ni comunidades es obligatoria, de manera que deberás consultarlo con el veterinario

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Para proteger a tu gato contra la panleucemia, calicivirosis y la rinotraqueitis se le administrará una única vacuna, la denominada Trivalente. Esta vacuna es la primera del calendario y deberá ir acompañada de un refuerzo pasadas las tres semanas de la administración.


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La siguiente vacuna que deberá administrar a tu gato el veterinario será la de la leucemia. Esta es una de las enfermedades más comunes en gatos y la cual acoge un índice de mortalidad más alto, por ello es tan importante que lo protejas contra ella.

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Después de la leucemia, se le administrará, en los lugares que sea obligatoria, la vacuna contra la rabia. Si en tu ciudad de residencia no es obligatoria, siempre puedes ponérsela de manera voluntaria. Otra de las vacunas de carácter voluntario es la que actúa contra el PIF (peritonitis infecciosa felina), sin embargo no es aconsejable administrarla. Lo más recomendable es que consultes a tu veterinario si considera oportuno poner esta vacuna o no.

cuales son los síntomas de cáncer en los gatos

  • Protuberancia o área hinchada en cualquier parte del cuerpo de tu mascota. Si tu gato tiene un bulto no significa que sea cancerígeno, pero no hay manera de saber con seguridad que no lo sea, por ello, el veterinario debe valorar su naturaleza y ver si necesita hacerle una biopsia o las pruebas pertinentes.
  • Mal aliento o malos olores. Puede presentar mal olor ya no solo en la boca, sino también en las orejas o en cualquier parte del cuerpo. Debe ser revisado inmediatamente, ya que los cánceres de boca, nariz o regiones anales pueden provocar muy mal olor.
  • Problemas gastrointestinales. Diarreas, vómitos o dificultad en orinar o en defecar. Además si tu gato tiene el abdomen hinchado o distendido podría ser un signo de acumulación de secreciones anormales.
  • Heridas que no se curan o cualquier tipo de secreción. Si tu gato tiene heridas que no cicatrizan o que no llegan a curarse, acude al veterinario inmediatamente que le revise.
  • Pérdida de apetito/peso. La pérdida de peso repentina sin motivo aparente junto con otros signos, o deja de comer sin causa. Acude a tu veterinario y coméntale qué le ocurre a tu gato.
  • Tos o dificultad para respirar. Si tu gato tiene tos o una respiración anormal puede ser causada por una enfermedad cardíaca, enfermedad pulmonar o también por cáncer que puede propagarse por los pulmones. Por eso es imprescindible que si notas este signo acudas al veterinario para que compruebe que le ocurre a tu mascota.
  • Letargo o depresión. Si notas que tu gato tiene una actitud diferente, duerme mucho más, no juega o no tiene ganas de hacer nada puede ser un signo a tener muy en cuenta.
  • Piel irritada, o pelo sucio porque no tiene interés en limpiarse.
  • Evidencia de dolor. Se ve que algo le pasa a tu gato, que algo le duele.

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    bienvenidos

    yo quiero ser veterinaria ya que me gusta mucho los animales en especial los perros y los gatos .


    Vacunas para perros


    Una de las primeras cosas que tenemos que hacer cuando incorporamos un perro a la familia es comprobar en qué estado se encuentra su calendario vacunal .  La mayoría de los criadores y protectoras ya entregan a los animales con algunas vacunas puestas pero, cuando el perro pasa a ser nuestro, tenemos que empezar a responsabilizarnos de sus vacunas.

    Las vacunas más importantes que nuestro perro debe tener son:Vacunar al perro
    A parte, podemos escoger si ponerle o no otras vacunas como:
    • Traqueo bronquitis (tos de las perreras)
    • Piroplasmosis
    • Coronavirus
    Es vital vacunar nuestro perro para que no contraiga ninguna de estas enfermedades, algunas de ellas mortales. La vacunación es una acción preventiva que le puede salvar la vida, por lo que es recomendable no escatimar en gastos (en el mercado hay muchas marcas de vacunas, cada una con un precio y una calidad diferente). Desde mundo Animalia aconsejamos escoger un buen veterinario que sea de confianza, que se muestre atento y que ofrezca un buen trato tanto a nuestro perro como a nosotros, sus dueños.

    ¿Por qué vacunar a mi perro?

    Como ya hemos comentado, vacunar al perro es protegerlo ante posibles enfermedades. Al igual que nosotros, él también vive en un mundo agresivo y lleno de peligros que, aunque no se vean, pueden causar mucho daño. Nos encontramos rodeados de virus, algunos no muy peligrosos (que a veces producen infecciones externas sin que nos demos cuenta) y otros realmente agresivos que pueden provocar la muerte del animal.

    Para saber qué vacunas necesita nuestro perro es importante consultar al veterinario, que nos aconsejará acerca de cuándo administrarlas y en qué condiciones. Es importante estar enterados de qué tipo de vacunas ponemos a nuestro perro, es decir, el por qué lo estamos vacunando. Muchos dueños van al veterinario a vacunar a su perro “por que toca” y realmente no saben qué le están haciendo a su perro. Si tu veterinario es un buen profesional, seguro que no tendrá ningún problema en responder a todas tus dudas y preguntas.

    ¿Cómo actúan las vacunas?

    Las vacunas funcionan de una forma muy sencilla. Vacunar quiere decir inocular, en el cuerpo del animal, una enfermedad atenuada con el propósito de que el organismo y el sistema inmune la detecten y provoquen la fabricación de defensas. Estas defensas no viven para siempre en el cuerpo del animal y por eso es necesario revacunar, para que el cuerpo vuelva a fabricarlas.

    La vacunación de una enfermedad debe realizarse cuando los anticuerpos del perro no existen o son muy bajos.  Si vacunamos a un perro con los anticuerpos suficientes, la vacuna no tendrá ningún tipo de efecto en el organismo. Razón por la cual, el veterinario deberá elaborar un plan de vacunación para nuestro perro, que nos indicará cuando es el momento adecuado para vacunar.

    ¿Cuándo vacunar a mi perro?

    Vacunar a un cachorro

    Es imprescindible vacunar a nuestro cachorro, ya que su sistema inmune aun es débil. Antes de vacunarlo debemos asegurarnos que no tenga parásitos internos que, al alterarle la salud, le puedan ocasionar que las vacunas no alcancen la eficacia deseada.

    La mayoría de los veterinarios acostumbran a seguir el mismo calendario vacunal, aunque hay varios factores que podrían influir en la programación de dichas vacunas. El estado inmunológico del cachorro, la zona de residencia y los hábitos su nueva familia podrían exponerlo con más facilidad a cualquiera de las enfermedades ya mencionadas. Es importante hablar con el veterinario de todo esto y establecer un calendario que se adapte a las necesidades de nuestro perro. Cuanto antes esté el perro vacunado, antes podrá salir a la calle y antes empezará su socialización.

    El calendario vacunal estándar recomienda empezar a vacunar al cachorro a partir de la sexta semana y a partir de ahí repetir la vacunación durante las semanas siguientes:
    Calendario vacunal
    En algunas comunidades autónomas de España, como por ejemplo, en Andalucía, también es obligatorio volver a vacunar de la Rabia al cabo de un mes de haber puesto la primera vacuna, es decir, al 6º o 7º mes.

    Vacunar a un adulto

    Los perros ya adultos deben acudir, al menos, una vez al año al veterinario para una visita de reconocimiento y revisión, dado que es mejor prevenir que curar. No hay que esperar a que la mascota esté enferma para acudir al veterinario.

    Como vemos en el cuadro superior, a los perros adultos se les suele vacunar cada año o cada dos años con una vacuna multivalente que cubre todas las enfermedades importantes.

    Posibles efectos adversos de las vacunas

    Aunque inocular una vacuna es favorable para la salud de nuestro perro, también debemos tener en cuenta que, en algunos casos, dicha vacuna puede tener efectos adversos para algunos perros.

    Uno de los efectos secundarios más comunes, especialmente en los cachorros, es la letargia y la fiebre. Puede ser que al poco de inocular la vacuna, el perro esté algo más decaído, tenga más sueño y no quiera que le molesten. Normalmente, en estos casos, no hace falta hacer nada, ya que los síntomas remiten a las pocas horas. Si, de lo contrario, al perro le subiera bastante la fiebre, le podríamos administrar algún antipirético puntual.

    Vacunar a un cachorroOtro efecto adverso podría aparecer en forma de quiste, es decir, de un bulto endurecido en la zona de la inyección. Algunos perros son muy sensibles a determinadas marcas de vacunas y otros simplemente no se están quietos a la hora de realizar la punción.

    También podría pasar que el perro fuera alérgico a la vacuna, más concretamente a los excipientes que lleva la vacuna inoculada, por lo que es importante no volver a utilizar esa marca en concreto para sus revacunaciones posteriores. Las reacciones alérgicas pueden aparecer en forma de:
    • Abones por todo el cuerpo del tamaño incluso de una nuez, estando el perro muy inquieto, rascándose todo el cuerpo y la cabeza.
    • Hinchazón de la cabeza y algunas décimas de temperatura.
    En cualquiera de los dos casos debemos acudir a nuestro veterinario para que inocule un antiinflamatorio para reducir la reacción alérgica. En casos extremos el animal puede incluso llegar a presentar problemas gastrointestinales y, en casos muy raros, problemas respiratorios y cardiovasculares.